César Augusto Monteiro (2011)

Música Migrante em Lisboa. Trajectos e Práticas de Músicos Cabo-Verdianos

Lisboa: Editora Mundos Sociais, 296 pp.


Reseñado por Natalia Gavazzo

Universidad de Buenos Aires, Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, Universidad Nacional de San Martín


En los últimos veinte años, las migraciones internacionales se han convertido en uno de los principales temas de la agenda mundial y en objeto de estudio privilegiado para disciplinas muy diversas, produciéndose así una abundante variedad de enfoques y producciones a ese respecto. Los mismos suelen centrarse en aspectos tales como los factores de expulsión/atracción, las políticas migratorias, la inserción laboral o la indocumentación, entre otros asuntos que se imponen como centrales. A raíz de esto, puede notarse una escasez de investigaciones sobre temas menos acuciantes —como el arte— y que por eso son considerados secundarios. Sin embargo, cuando leemos libros como el de Monteiro nos damos cuenta de cuánto pueden decirnos las expresiones artísticas respecto de la vida de los migrantes.


Este libro —basado en una tesis doctoral— se enfoca en la producción musical caboverdiana en el Área Metropolitana de Lisboa (AML), específicamente en el barrio de Cova da Moura donde residen gran parte de los inmigrantes de ese origen y sus descendientes. Protagonizada por generaciones diferenciadas de caboverdianos, la comunidad musical que Monteiro analiza constituye un campo social en el que diversos agentes —músicos, compositores, intérpretes, productores e incluso público— interactúan mientras realizan actividades musicales vinculadas al país de origen y a la diáspora. El examen del funcionamiento de este campo de “música migrante” sirve para explicar los procesos de desterritorialización, descontextualización/recontextualización, hibridación transnacional, sincretismo y/o construcción de una “tercera cultura” vinculada a Cabo Verde experimentados especialmente por la así denominada “segunda generación” ya nacida en Portugal.


El libro de Monteiro se divide en nueve capítulos. En el primero el autor realiza un completo estado del arte en el que resume las propuestas conceptuales existentes para el estudio de la música como cultura, mientras que en el segundo explica el modo en que realizó su investigación combinando técnicas cuantitativas y cualitativas de recolección de datos. Ya en el tercero se enfoca en el proceso de la migración de Cabo Verde a Portugal, centrándose en los aspectos culturales e identitarios en la constitución de la comunidad, discutiendo nociones clave —como la diáspora— desde una perspectiva transnacional. En el cuarto capítulo entra de lleno en el tema de la música caboverdiana, proponiendo un marco para su estudio y comprensión en contextos migratorios, en específico su vínculo con las identificaciones, mientras que en el quinto lo vincula al mundo musical portugués, su inserción y penetración como (sub)campo musical emergente. El sexto y séptimo capítulo se dedican a describir detalladamente la constitución y el funcionamiento del campo musical caboverdiano en el AML desde un punto de vista cualitativo y cuantitativo respectivamente. Los dos últimos capítulos constituyen el aporte más original del libro en tanto se centran, por un lado, en la relación de los descendientes con la música de Cabo Verde y, por el otro, en el lugar de la mujer dentro del campo musical, especialmente de las batucadeiras, género tradicional interpretado con mucha frecuencia en Lisboa.


Primeramente, Monteiro realiza un detallado relato histórico de la conformación del campo musical caboverdiana en el contexto migratorio, cuya figura central es el “músico” en un sentido amplio. Analiza la trayectoria de los músicos inmigrantes que viven en el AML, mediante la producción musical caboverdiana. Ahora bien, los músicos inmigrantes comparten el campo con otros agentes que también participan de la actividad musical ya sea por motivos económicos, sociales, culturales o políticos. Y como todo campo social, el de la música de Cabo Verde en Lisboa se caracteriza por la distribución desigual de capitales al interior, lo que determina una estructura jerarquizada y en permanente transformación, en función de disputas por el poder entre los agentes que lo componen.

Asimismo, el libro muestra que la música puede funcionar como “bandera de visibilidad” para inmigrantes como los caboverdianos en Lisboa. Por un lado, porque ha sido (junto con la lengua) uno de los componentes más representativos y estructurantes de la identidad cultural caboverdiana en la diáspora. Por otro lado, muestra que ha sido a través de la música que los portugueses se acercaron a los caboverdianos. Así, la música ha funcionado como puente entre caboverdianos y entre portugueses y caboverdianos a lo largo del proceso migratorio.


Otro de los temas que se destacan en este libro es el atravesamiento generacional en la producción musical. ¿Cómo influyen las diferencias entre generaciones —padres e hijos, adultos y jóvenes/niños— no sólo en la experiencia de la migración sino además en la producción musical? Aquí Monteiro se enfoca en las relaciones entre los más jóvenes y los más viejos agentes de ese campo musical, y asimismo en las relaciones entre los padres nacidos en Cabo Verde y sus hijos nacidos en Portugal. Estos dos sentidos de generación conviven y se explican mutuamente en su estudio permitiéndonos comprender no sólo algunas de las disputas del campo musical caboverdiano en el AML, sino sobre todo la dirección que están tomando los cambios culturales de la mano de las nuevas generaciones. Monteiro muestra que más que una transmisión intergeneracional de una cultura de origen, los hijos de caboverdianos enfrentan activamente un dilema: si se mantienen “caboverdianos” podrían enfrentarse al “ostracismo social” y continuarían, por ejemplo, “los ataques en la escuela”, mientras que si se convierten en “portugueses” podrían alejarse de los sueños de sus padres de progresar sin perder la solidaridad étnica de la comunidad diaspórica y la preservación de los valores tradicionales. Esto tiene consecuencias para las relaciones intergeneracionales, tanto adentro de las familias como del campo musical migrante. Aunque no se puede simplificar la complejidad de situaciones que se dan en casos concretos, este estudio demuestra cuán desafiante es el tema no sólo para los hijos sino para quienes emprendan un análisis de las diversas estrategias de integración que los migrantes despliegan, ya que postula como central el plano cultural para comprender su absorción en la denominada sociedad receptora.


En síntesis, el libro de Monteiro, aborda diversas cuestiones que pueden ser comparadas con otros grupos de descendientes en otras partes del mundo. Porque, por un lado, plantea temas de alcance global como el transnacionalismo de los migrantes, el dilema de las segundas generaciones y de las relaciones de género, y el lugar de la mujer a partir del análisis de la producción musical. A la vez, logra hacer esto a partir de un trabajo de carácter fuertemente local, vinculado a la historia inmigratoria de Portugal y a la configuración urbana especifica del AML en la que se sitúa un barrio particular compuesto mayormente de inmigrantes africanos. Por eso, a pesar de su especificidad, este libro también sirve como modelo para replicar en otros casos de estudios en donde los descendientes de inmigrantes que ya son parte de las sociedades de destino encuentran en la música algo más que una forma de expresión o comunicación: una herramienta de transformación social y cultural de sus propias realidades.


De ese modo, esta obra contribuye al fortalecimiento del campo de estudios sobre música y migración que se encuentran en expansión, a la vez que fortalece la tendencia mencionada a analizar la dimensión cultural de las migraciones sin dejar de abordar problemas urgentes en el tratamiento de esta temática. Por todo ello constituye una referencia importante para quien busca sumarse a los esfuerzos por atender a las políticas y discursos en torno a la cultura y a la identidad, bajo cuya clave se viene efectuando una nueva tematización de las migraciones internacionales que sin dudas completa y mejora nuestra comprensión integral de esos complejos procesos sociales.